creciendo juntos
formación continua para parejas y matrimonios
Las relaciones de pareja no tienen techo de cristal, no hay puntos a partir de los cuales no se puede avanzar más en confianza, en intimidad o en amor. Siempre podemos crecer juntos un poco más, evolucionar, llevar más allá nuestra relación.
Por eso Encuentro Matrimonial ofrece un programa de formación continua. Y es que abordar y profundizar en temas especialmente relevantes es una forma de crecer en relación, en intimidad y corresponsabilidad.
¿para qué formarse como pareja o matrimonio?
Profundizar juntos en aspectos especialmente significativos ayuda a que la relación sea más consciente, más auténtica y significativa para ambos.
Hay temas sobre los que basamos nuestra vida en común pero que no se abordan en el día a día. Afrontar esos temas da opción a armonizar las necesidades y expectativas de cada uno en un proyecto común antes de que aparezca el conflicto.
Además, para cualquier pareja, formarse es un incentivo y estímulo para no caer en la rutina y el acomodamiento.
¿cuáles son los programas de formación para parejas?
1.- Nuestras diferencias, fuente de vida.
¿Sabéis por qué discutís o os enfadáis la mayor parte de las veces? Pues seguramente porque uno quiere una cosa y el otro otra distinta, o porque uno hace las cosas de una manera y el otro las hace de forma diferente, o porque uno tiene unas prioridades y el otro otras diferentes. Al final son las diferencias las que nos enfrentan.
En esta formación descubriréis la relación que hay entre nuestras diferencias y las necesidades personales de ser amado y ser válido, y las necesidades relacionales de autonomía y pertenencia. La tendencia a potenciar unas y descuidar otras hace que, a veces, nuestra relación esté desequilibrada y esto afecta a las principales áreas de nuestra vida, entre ellas la relación con nuestra pareja.
Gestionar bien nuestras necesidades ayuda a que esas diferencias que ahora os separan puedan ser «fuente de vida» para vuestra relación.
2.- Presencia.
¿Realmente estoy contigo cuando estoy a tu lado? ¿estás tú verdaderamente presente en mi vida? Este fin de semana de formación se centra en la importancia que tiene esta palabra en toda relación: presencia de cada uno hacia sí mismo como persona, presencia como esposos o personas comprometidas con la pareja, presencia de sacerdotes y consagrados/as con su gente, presencia en el ejercicio de nuestra responsabilidad en la sociedad y en la comunidad/Iglesia, y presencia en Dios.
Tras tomar consciencia de la importancia de vivir presentes en todos estos ámbitos, se os presentan unos caminos o vías que hacen que sea posible vivir en presencia.
3.- Libres para vivir.
En verdad, ¿soy libre? ¿o me creo libre pero no lo soy? Con esta formación podréis tomar conciencia de lo que significa ser libre y de la trascendencia que tiene vuestra alianza en vuestra libertad. Esta alianza aporta la seguridad y confianza suficientes para poder superar los miedos que os frenan y, así, vivir más libres.
En este camino de libertad todos nos enfrentamos a los tres deseos innatos del ser humano: el deseo de poseer, el del placer y el del poder. En el Evangelio podemos encontrar propuestas que pueden ayudarnos a controlar esos deseos que nos limitan como personas y como pareja.
4.- La aventura de creer.
¿En qué creo?, ¿creo en mí?, ¿realmente creo en ti? Esta formación está enfocada a matrimonios creyentes y a parejas que buscan un sentido de trascendencia en su relación.
Da una nueva perspectiva de lo que supone creer al abordar las tres caras de la fe que dan sentido a la vida: creer en mí, creer en el otro, y creer en el “Otro” que es Dios. Se reflexiona sobre cuatro preguntas: ¿Quién soy como persona creyente? ¿Quién es Dios para mí, en qué Dios creo? ¿Cómo nos revela Jesús quién es Dios y cómo podemos crear un vínculo con Él, si esta es nuestra opción? ¿Quién se beneficia de que nosotros creamos? Y es que creer implica creer con otros.
Nota: Todos estos programas de formación van dirigidos a parejas y matrimonios (también a sacerdotes y consagrados/as) que han vivido previamente el Fin de Semana de Encuentro Matrimonial y que, por lo tanto, ya conocen la metodología de trabajo.